viernes, 30 de agosto de 2013

Aquel que sea sorprendido




Hace algunos ayeres, en alguna de mis visitas a las playas de Puerto Escondido, me topé con un curioso anuncio en la barda de una casa:

Aquel que sea sorprendido orinando en este lugar, será consignado a las autoridades

Después de leerlo, me quedé pensando en la semántica del enunciado, y en una nota menos pseudofilosófica y si más escatológica, en lo harto que debería estar el dueño de encontrar deshechos -fisiológicos- humanos en su propiedad. Pero creo que el don (regresando a la semántica) cometió un error garrafal. Si, el propietario de la vivienda debió haber estado hasta el copete de ver su pared blanca con adornos de agüita amarilla, y todavía más hasta la madre, de limpiarlos. Pero dentro de su enojo, no prohibió a las personas que hicieran pipí en su pared, incluso, hasta podría estar realizando una invitación a hacerlo…

Aquel que sea sorprendido orinando en este lugar, será consignado a las autoridades
Aquel que sea sorprendido orinando en este lugar
Aquel que sea sorprendido

No me está prohibiendo orinar en su pared. Me está diciendo que SI ME VE orinando su pared, me va a llevar al ministerio público (o tal vez me ponga unos fregadazos, eso lo veo más viable y práctico). En todo caso, no voy a evitar mojar su pared, sino que voy a evitar que me vea haciéndolo. “¡Pero iCthulhutl! Esa es sólo una forma figurativa de dar la advertencia. ¡No seas mamón y no te claves!”. Y efectivamente, es una forma de decir “no hagas esto”, pero creo que nos deja entre ver cómo somos los mexicanos.

A los dichos se les conoce como la famosísima “sabiduría popular”, y mi abuelita tenía un dicho (bueno, en realidad no, pero siempre es agradable pensar en las abuelitas diciendo un dicho) que reza más o menos así:

“¿Pena? Pena es robar y que te cachen

No es de pena ser un malandro, vividor, gandalla que despoja a las personas de los bienes que con tanto esfuerzo (o no), consiguieron. Lo de pena es que se den cuenta que lo haces.

¿A que quiero llegar con todo esto? La verdad no sé. No voy a caer en el lugares comunes de decir "cada pueblo tiene el... bla bla bla", o "enaltecerme" para señalar con el dedo “a una sociedad permisiva que bla bla bla...”. Lo que probablemente quiera hacer, es señalar cómo somos, medio taimados y muy listillos, lo cual incluso puede que esté bien, a final de cuentas, ese es el mexican way (basta del “ser como”). Pero entonces, en un ejercicio de honestidad, debemos empezar a reconocer lo que realmente deseamos, y sobre todo, lo que podemos dar. Por ahí dicen que eso de la democracia en México nunca ha funcionado, y dadas las evidencias, hay posibilidad de que sea verdad… Pero entonces ¿Qué si nos puede funcionar? La verdad, no sé.

1 comentario:

  1. Doctor, de hecho en la disfuncionalidad de las cosas es precisamente donde encontramos cabida a su orden. El mismo caos tiene un orden y un sentido, por lo que si las cosas (dis)funcionan asi, quiere decir que operan bien (no necesariamente de forma correcta). La pregunta yo diria es..que otras cosa puede funcionar?

    ResponderEliminar