lunes, 19 de agosto de 2013

La Leyenda del Maratón

De acuerdo a la mitología griega, cuando Filípides notificó sobre la victoria ante los Persas en la batalla de Maratón, no sólo recorrió 42 kilómetros, sino con el último aliento pronunció la palabra viké, es decir, victoria.

Y es que en realidad, la palabra prueba es no podría quedar más adecuada ante lo que esta singular competición. Correr 42.195 km representa enfrentarte al máximo de tus capacidades como ser humano y no existe entrenamiento tan preciso como la experiencia de recorrer cada metro de un maratón. Son las pruebas extremas, aquellas que extienden el potencial del ser humano y, el cual, no vuelve a ser el mismo después de ellas.


El discurso interno es aquel te constantemente reta al ser humano para el desarrollo de cualquier actividad. Una carrera de tal magnitud, no es otra cosa que la constante confrontación con uno mismo. Es por esto, que es tan temida o respetada la prueba.  Los factores psicológicos imperan sobre cualquier forma de entrenamiento; así pues, la estructura de nuestro discurso es aquella pared que se nos sitúa frente a nosotros y no es el kilómetro 30, esa pared esta desde antes del kilómetro 1.


Durante esta competencia, el ser humano experimenta el dolor físico y, más aún, lo emocional que se deriva del primero. Puesto que nuestras capacidades están expuestas, nuestra psique está desnuda; es decir, aquellos mecanismos de defensa que operan en lo cotidiano se vuelven endebles y nos quedamos solos con nosotros mismos. He ahí la experiencia de un maratón.  De alguna forma, al terminarlo todos nos volvemos la leyenda de Filípides, porque portas el mensaje de victoria, la gran victoria sobre uno mismo; la cual es, la mayor de las victorias.  Cuando los atletas cruzan la línea de meta, su brazo alzado y su expresión de júbilo no es más que el haber conseguido ensanchar los límites de la experiencia

La respuesta a las grandes preguntas en el correr, es la misma a las grandes interrogantes en la vida: haz lo mejor con lo que tengas y vuélvete leyenda. 

Doctor León

Filípides llegando a Atenas (Luc-Oliver Merson, 1869)








2 comentarios:

  1. The Blerch! http://theoatmeal.com/comics/running

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  2. Notable comentario Dr Bojalil, efectivamente la pared mas que un estado fisico, es un estado psicologico. Al correr, compites y vences a tu yo, no al otro que se postra junto a ti. Correr, es un acto psicologico, mas que fisico.

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