EL RINCÓN DEL REPTIL AÑO 2 VOL. 1 “LADRIDOS POR MORDIDAS”

En este cínico espacio de “Da Nathing Box” siempre hay un momento en que un reptil se pone filosófico.  Tras haber pasado por mi periodo de Toño Esquinca me llegó un duro golpe de realidad.  Se vio reflejado en una cosa insignificante, unos mugrosos boletos de avión a Europa que me costarán 2 mil pesos más de un día para otro solo por un insidioso aumento de impuestos a la turbosina, cortesía de nuestros flamantes políticos. 

Lo que me sorprendió es lo poco que hacemos cuando nos están ensartando el camote. El mexicano es una especie curiosa, como los perros Chihuahua.  Ladran como desquiciados pero no tienen mucha mordida.  Como los Xolos, servimos para todo pero por no tener pelo nos da frío. 

Hay que ser honestos, nuestra generación se ha distinguido por su apatía.  ¿Que me están cobrando el alcohol al quíntuple en el antro?  No hay pedo, lo pago.  ¿Nuevos impuestos?  Seguro es para que el gobierno haga mejor las cosas (y las mujeres vuelan).  ¿Me atendió mal el mesero?  Le voy a dejar su propina, pobrecito.  ¿Que no les vamos a dar aguinaldo?  Mejor ni me quejo no vaya a ser que me quede sin chamba.  ¿Que la selección mexicana está jugando del nabo?  ¡Vamos a llenar el Azteca! 

Estas piedritas son las piedritas que nos llevan a nuestra propia destrucción.  Pero no es algo privativo del mexicano. Con ladrar ventilamos un poco de esa frustración, pero no aligeramos la carga.  Somos una generación que se ha resignado… ¿Para qué pelear si nos van a acabar matando? 

Incluso hay rolas que hablan del incipiente destino de nuestro mundo… Lorde ya de plano dijo “We’ll never be Royals”, John Mayer por su parte dijo me siento a ver cómo se mueve el pedo en “Waiting on the World to Change”.

 

Estamos dispuestos a aceptar lo que “Dios nos mande” y a no mover mucho las aguas porque al final nos acabamos cansando.  Claro, nos indigna que quemen a un perrito por internet y posteamos en Facebook como locos para mostrar nuestra furia.   Nos quejamos de la impunidad de que saquen a Raúl Salinas y encima le devuelvan hasta el último centavo que robó.  Pero en medio de esa sinfonía de ladridos… no hicimos nada al respecto.

Eso es justo lo que los grupos de poder están esperando, y no nos engañemos porque no van a soltar los privilegios por la buena.  ¿Qué apalancamiento tienen nuestras palabras si son solo eso?  De un lado tenemos la fuerza del dinero y del Estado, pero nosotros tenemos el poderoso Facebook.  Creo que ni la mitad de los políticos tiene una cuenta propia como para que nos oigan. 

Y así sigue la interminable sinfonía de la injusticia… aunque, ¿Quiénes somos para decir que es injusto que nos roben si nosotros lo permitimos?

Lo que te pido como propósito de año nuevo es cambiar el ladrido por una mordida.  Si muerdes esa mano que te pega igual y te vuelve a pegar.  Muerde otra vez, y otra, y otra… muerde con todas tus fuerzas.  Muerde como la perra más viciosa del planeta.  A la mano no se le va a quitar la intención de pegarte, pero lo pensará dos veces antes de hacerlo. 

Si alguna parte de esto resonó con algo de lo que tu piensas, te pido que lo compartas… pero por lo pronto te espero el próximo Jueves en “El Rincón del Reptil”, el espacio más cínico de Da Nathing Box.